O800-desamor

Si hubiera sabido que después de tu rechazo,
venía con vehemencia una extraordinaria (auto)aceptación,
hubiera metido las patas mucho antes,
al lodo de tu desamor.
Para encontrar (mucho) más rápido,
los rubíes y los vestigios de aquella que siempre fui,
y nunca(no)podre ser.
Terminaste siendo el trampolín,
que me dio el impulso,
para mandar al carajo aquella que nunca quise,
(ni quiero) ser.
Fuiste espejo y bola de cristal.

No te voy a mentir, a veces sí.
A veces arriba está el sol,
tibio y resplandeciente.
La música envolvente,
colorinche y atrayente.
La luna aterciopelada,
clara y oportuna.
Y las estrellas,
que dibujan las posibles fantasías,
que tejo como un mándala de fe.
Y a veces, sí.
Abajo estoy yo.
Sombría y fría,
mis (muchas) hipótesis,
el amor hecho velorio.
El miedo de nunca (volver a) poder.

Y a veces sí.
(A)Dentro, estas vos.