¿Cómo ejercen el poder las feministas?

Hace muchos años las feministas vienen haciéndose espacio en la historia, llegamos a un punto en el que tal afirmación resulta innegable verdá.

Sino preguntale al Raúl más Raúl vas a ver que algo ya entiende, por lo menos que no da decir o hacer ciertas cosas. Como aquella vez que Iúdica no pidió disculpas a Pía Swau por acosarla en vivo, pero tuvo que agachar la cabeza ante el sermón de sus hijas que, me imagino que no muy amablemente, le explicaron que ya no podía comportarse como Olmedo en la TV. Que los tiempos cambiaron.

Y como los tiempos cambiaron, gracias la lucha feminista, hoy hay compañeras ocupando lugares. Por supuesto no al nivel que los señores, ni hablar. Pero de a poco, muy de a poco, vamos conquistando algunos espacios de poder. Y de eso vamos a hablar en esta nota. De poder.

¿Qué hace una feminista cuando llega al poder?

Es fácil imaginar un mundo de fantasías y la mejor de las utopías al pensar un poder ejercido bajo las lógicas del feminismo. Pero lo cierto es que es súmamente incómodo e incompleto.

El feminismo es incómodo por empezar, por eso cuando empezamos a cuestionar y entender(nos) sujetas políticas no podemos parar ni volver a meternos en ese cuento de hadas del patriarcado, donde somos felices, comemos perdices y vivimos por siempre.

Hablemos de mujeres, compañeras, feministas en lugares de poder, los que pudimos acceder hasta ahora. Me quiero referir principalmente a aquellas que tienen gente a cargo, las jefas, patronas, dueñas. Las "superiores".

Sabemos que no van a usar su poder cual Fiscal de la Nación, yendo de bulo en bulo, adoptando algún jovencito como pareja de turno. Sabemos que no se juntan con sus compañeras a presumir con cuántos se acostaron esta semana, o el auto que tienen, ni cómo tienen más guita e impunidad. Esa es la expresión de poder de los tipos.

Sin embargo para abusar del poder no hace falta ir tan lejos. Veamos algunos ejemplos:

Sandra tiene 53 años, 3 hijos y un esposo con una perimetral. Ella salió de ese vínculo violento con ayuda de un grupo de mujeres. La veían mal, la fueron asesorando y con el tiempo Sandra empezó a poner en palabras lo que sufría. Hoy ocupa un cargo jerárquico en aquella organización que le dió lugar. Tiene un equipo a cargo.
Sandra sigue siendo insegura para muchas cuestiones, no cree que merezca realmente el lugar en donde está. No sabe lo que es que la respeten y se siente atacada cada vez que alguien sugiere lo contrario a su opinión.
Se siente sola porque sabe que para sus pares varones ella siempre va a ser "la pobre mujer golpeada", entonces quiere endurecer su imagen mostrándose vigorosa y firme. Es así que llegó a maltratar a varias personas de su equipo. Sostiene que la "traicionan" cuando la contradicen, no acepta sugerencias y utiliza su poder para represaliar a quienes le caen mal. 

Débora tiene 42 , es diseñadora gráfica. Hace como 12 años trabaja en el mismo lugar, sabe que su valor ahí es su fidelidad, hacer todo lo que diga su jefe. Aunque tenga que trabajar fines de semana, fuera de horario o dejar de atender sus asuntos personales para cumplir con lo que le pidan. "Yo lo que tengo es que saco todo rápido", repite como su slogan personal. 
Débora tiene un pequeño grupo de colegas a cargo. Sus maneras de ejercer esa responsabilidad es a base de maltrato y abuso de poder. Si le caés mal, te buchonea con el jefe. Si no hacés lo que dice, te maltrata.  Es muy controladora, quiere todo para ayer y quien no le siga el ritmo seguro pierda el trabajo.

Giselle tiene 38 años, tiene un posgrado y hace años viene haciendo carrera en su empresa. Por fin le dieron el puesto de sub secretaria, su esfuerzo y sacrificio fue tal para conseguir ese lugar, que hoy está completamente aferrada a él, a tal punto que no quiere delegar ninguna tarea. Teme que no la necesiten más y la reemplacen con alguno de los que juega a la pelota con el secretario. Giselle se maneja con mucha frialdad, "sino sos así te boludean, piensan que porque sos mina te pueden pasar por encima", dice. Cuando alguien de su equipo demuestra operabilidad se siente amenazada. Cree en el derecho de piso y lo hace pagar a todo aquel que sea más joven que ella. Es de esas personas que creen que cuando te dan trabajo te están haciendo un favor.

(todos los casos son inspirados en casos reales, resguardando la identidad de las personas)

Y es que es sumamente contradictorio hablar de feminismo en un sistema patriarcal, es una rebeldía, una grieta, un temblor en el piso donde no se sabe cómo se van a acomodar las cosas después de que se sacuda todo.

El patriarcado es por definición un sistema de jerarquías, eso significa que hay alguien arriba, y alguien abajo. Que uno ordena, y otro obedece. Entonces, si el feminismo cuestiona las jerarquías, entre los géneros por ejemplo, ¿cómo no va a cuestionar todas las demás?

Y acá entran todas las disciplinas desde donde puede ser abordado el feminismo. Y ya sé qué estás pensando "pero Micaela, en algún momento hay que ordenarse, organizar, construir, y eso es con órden y la jerarquía es órden". Y yo te digo, sí pero no.

Coincido en que un órden tiene que haber, no podemos vivir en el caos porque no nos conduce a nada. Pero el feminismo habla de vínculos, de cómo nos tratamos, de respeto y de una igualdad entre los seres humanos. ¿Entonces por qué la compañera feminista maltrata a las demás cuando ocupa un lugar de poder? ¿Porque la única manera de ejercer el poder es de manera patriarcal?

¿Qué haría el feminismo ante el poder?

El feminismo se trata de repartir ese poder, como cuando Cady Heron gana como reina del baile en Mean Girls (película obligatoria) y rompe la corona para darle un pedacito a cada piba de la escuela. Renuncia a ese reconocimiento, al poder que le brindaba ser nombrada la reina de la escuela. (Sí mis ejemplos son hermosos ya lo sé)

El feminismo renuncia al ego de tener el control, porque sin el feminismo no habría mujeres ocupando lugares.

¿Son culpables esas mujeres de ejercer su poder de manera patriarcal? En parte, pero es nuestro deber como compañeras recordarles que la única manera de crecer es juntas. Juntes. Que si están ahí es por la lucha de muchas que vinieron antes que ellas. Y si no son feministas, acercar información es primordial.

El abuso de poder no tiene que ver con el género sino con una concepción de lo que significa "estar a cargo de algo" , jerarquizar nos puede dañar sino entendemos que es estrictamente organizativo, que tiene que haber un orden y que eso no significa que el que queda por debajo es "menos" que el que está por arriba.

Acá es cuando entra el capitalismo, a ponerle valor monetario a las jerarquías. Pero eso lo dejamos para otro día. Mientras tanto decile a tu compa jefa, "no te subas al pony porque vos sos una conquista del feminismo" y a las compas patronas les decimos, tienen la oportunidad de hacer la diferencia, no se comporten como un chabón.

El desafío es construir nuevas maneras de ejercer el poder, representando y no ordenando. No creernos el cuento de la meritorcracia, de pensar que nosotras, por algún motivo, somos especiales, más que cualquier otra. Y nunca olvidar que si logramos algo en este mundo, es gracias a millones de mujeres que vinieron y lucharon antes que nosotras.